Que haya llegado esta publicación, solo puede significar una cosa: que la cuenta atrás ha empezado y que, en menos de cinco días, llega el día P. El día de plantarte en la puerta del cole y empezar de nuevo… ¡otra vez!
Porque es curioso como empezamos de nuevo todos los años. Sí, hablo de años y no cursos porque ya sabes que para los profes, septiembre es como enero, ¡o mejor! No hay ni medio año que se le parezca a otro. Hay años que terminan siendo la pera, y otros la repera pero el inicio siempre es el mismo: nerviosismo los días previos, lista mental de todo con lo que tienes que aparecer el primer día, porque seamos sinceros, el primer día es para saludos, alguna que otra reunión, reorganizar tu clase o trasladarte a otra aula y poco más. Así que si eres de las que empieza la andadura por la enseñanza, olvídate de llevar 25 kilos de material propio el primer día porque es ABSOLUTAMENTE INNECESARIO.
A continuación, te voy a detallar cuáles son mis musts para el primer día y que sin ellos no funciono. Prefiero llegar un día al cole con el cerebro dormido o sin el móvil a que me fallen algunos de estos productos en la lista y ¡ojo! que hablo para los primeros días. Para el resto de días, probablemente incluyamos chorradicas al estilo MATERIALQUEESMÍOYQUEPREFIEROGUARDARENMIMAZMORRADELHOGAR. Así que…

1. Ropa cómoda.
Vale, ahí dirás, ¿qué te pasa? Yo te explico lo que me ha pasado alguna vez y, además, veo continuamente, no problem. Tras dos meses de comodidad absoluta, llega el primer día de trabajo y te motivas a arreglarte, a ponerte bien bella y a querer mostrar la mejor versión de ti misma que NO has mostrado durante los dos últimos meses porque estabas living la vida tranquila. A muchos y muchas, nos da por ponernos guapetones: que si camisicas, vaquericos bien ‘pretos’… y a la hora de llegar al colegio, empiezas a arrepentirte por activa y por pasiva: tu sangre ya no llega a los pies por falta de costumbre ‘vaqueril’, has empezado a sudar y con tu camisica haces un camacho… en fin, ropa cómoda. ¡Te quedan 180 días para vestir como quieras, y tu cuerpo se habrá acostumbrado a la cotidianidad lejana ahora mismo del vaquero!
2. Agenda
No concibo ir al cole sin una agenda. Los primeros días suelen decirse las fechas más importantes del curso. A mí me gusta registrarlas al momento para que mi cerebro cuadrado vaya predisponiéndose a lo que le viene por delante. Además, aconsejo que en esa agenda haya hojas vacías donde apuntes las primeras ideas que se comenten en el claustro de profes o en las reuniones por cursos: proyectos, valores que queréis fomentar, actividades que queráis probar… en fin, espacio para escribir medio Quijote. ¿Tu agenda no dispone de espacio? Sencillo, un mini cuaderno, folios grapados o post-its!
3. Estuche práctico
Recalco lo de práctico porque yo empiezo con lo esencial y acabo almacenando hasta la llave que libera al dragón de las antípodas. Está bien que te lleves coloricos, rotuladores, fluorescentes, pero ¡en serio!, los primeros días no los vas a utilizar todos. Entre tú y yo, estarás deseando llegar a casa para utilizar todas tus herramientas creativas y poner orden colorido en tu cabeza y en tu agenda.
4. Post-its
Antes hablábamos de hojas en sucio para borradores sobre posibles proyectos pero también me gusta tener a mano post-its que te permiten hacer lo mismo pero moviendo el post-it a una zona o día completo de la agenda. ¡No tiene más misterio!
5. Mac y iPad
En mi caso, este punto es obligatorio aunque entiendo que el resto podéis pasar directamente al punto 6. En el cole donde trabajo, la tecnología es el día a día de nuestra existencia y los profes llevamos Mac y iPad y los alumnos iPad así que 1+1, dos. 🤪 A pesar de ser meramente tecnológica, los tres puntos anteriores en mí tienen sentido porque soy la moñas de la papelería. Si no lo fuera, los hubiese eliminado, pero este punto, en mi caso, va antes que cualquier otro.
6. Botella de agua.
Creedme que algo tan obvio se me olvida día sí y día también. Tengo acceso a agua en fuentes, en el comedor y en mil sitios pero esos mil sitios no se mueven a la par que yo. Un botellín de agua te mantendrá activo durante toda la jornada.
7. Snack
Y ya que hablamos de bebida, hablamos de comida. Al igual que con el agua, tengo acceso a algún que otro snack en la sala de profes, en el comedor… pero es preferible llevarlo en tu bolso/mochila bien sea una bruta que unos cacahuetes y cuando apriete el estómago, ahí que va. Obvio si estáis en medio de un claustro no, pero si estás trasladando libros de lectura como una loca de un aula a otro, pues entonces sí.
Y esto, maestros, profes y teachers es lo que iría en mi bolso como esenciales a lo largo de los no-sé-cuántos-días-de-colegio que nos quedan por delante. Algunos días, echaré en mi mochila sonrisas y ganas y otros cansancio y dolor, pero intentaremos que haya mucho de lo primero y poquito de lo segundo. Puedes comentarme bien por aquí o en instagram-facebook cuáles son tus imprescindibles. ¡Especialmente para esta primera semana que nos espera!
Un abrazo,
Andrea.
2 comentarios en “Mis imprescindibles para la vuelta al cole”