🌴 V A C A C I O N E S 9 0 S S T Y L E ☀️

¡Hola! Hoy traigo una pequeña reflexión a modo publicación FIN de vacaciones… y es que nada más y nada menos que se me rompió el móvil el primerísimo día de playa y… oh, surprise! lejos de ser un drama (salvaguardando el dinero que me va a costar el nuevo móvil), descubrí una bonita sensación que llevaba muerta años… y décadas. Y es que, aunque como todo ser viviente, alguna vez me he propuesto ‘desintoxicarme de redes y de móvil’, la cruda realidad siempre ha sido que lo terminaba cogiendo para mirar cualquier cosa. Bien el correo, Google Maps, un chequeo rapidito a IG… o mirar 750 veces la hora. ¿Os ha pasado?

Como positivo de esta experiencia, he sacado mi actitud relajada de: ‘pues no tengo móvil y qué’, y de… no sé ni qué hora es, ni nada de nada más que lo que tengo aquí presente: la playa, mi familia y el sol, que por su posición diría que son las 11… 🤪

Sin querer desear mala suerte a nadie, ni desear que se rompan móviles así de repente, creo que deberiamos vivir un tiempo sin estar pegados a la pantalla, ¡pero qué difícil es cuando tienes uno a mano! Yo misma, desde que conseguí el móvil viejuno de mi marido, me he dado cuenta que instintivamente y sin conciencia alguna, el móvil me ha acompañado allá a donde he ido. Y es una sensación y una situación sobre la que tengo que trabajar porque no me gusta demasiado esa dependencia que hemos normalizado… ¿Recordáis los años 2000? Nos conectábamos a internet para ‘olvidarnos un poco de la vida real’, mientras que ahora ¡¡tenemos que dejar el móvil en casa para desconectarnos de la vida real (¡online, pero real!)!! Y es algo sobre lo que debo trabajar también porque mi peque me observa mucho y el móvil le llama mucho la atención… y no me gusta nada transmitir eso, sin querer claro…

Así que bueno, yo, la amante de la tecnología, os dejo una reflexión sobre una experiencia negativa para mi bolsillo pero muy enriquecedora. Muchos pensarán, qué gilipollez… pero en serio, estamos tan pegados a la pantalla que es como si te faltase algo… y si no me creéis, os reto a dejaros el móvil en casa un día… o dos… o tres. 🤪

¿Qué opinas sobre el tema? ¡Te leo!