¡¡Hola profes!! Hoy os quiero hablar de la importancia de la organización como profes y es que, a día de hoy, sigo trabajando y modificando mis prácticas docentes de año a año en busca de ese sistema que siempre se adapte y se ajuste a mí, a mis necesidades del momento.

Para mí, es la clave de todo éxito: una buena organización. Los motivos de por qué necesitamos ser los seres más organizados del planeta creo que quedan claros: 25 personitas dependen de nosotros y de cómo vayamos conduciendo la práctica docente… y a lo largo del día son muchas clases, normalmente sin pausas entre una y otra…

Que de vez en cuando nos pasen cosas como «no sé dónde he dejado los exámenes», «no sé por dónde nos quedamos ayer…», «no sé qué criterios de evaluación vamos a seguir»… o «no sé dónde guardé este documento en el Drive», no pasa nada.

Ahora bien, estamos a 300 cosas a la vez y, si te ocurre una, dos o tres veces a lo largo del curso , no pasa nada pero si es un continuo, entonces tienes que parar y replantearte tu práctica docente.

De normal, y por mi experiencia al hablar con otros profes, la mayoría nos organizamos medianamente bien en muchas cosas y lo intentamos con todas nuestras fuerzas en otras pero al final seguimos sin encontrar el método que nos funcione. Lo que está claro que posiblemente pruebes a organizarte y acabes siendo un caos. Si esto te ocurre, ¡no pasa nada! Prueba otra cosa… ¿que no te organizas bien con una agenda pero te da pena dejarla porque te has dejado pasti? ¡Déjala y prueba un planificador semanal… o incluso mensual! ¿Que te has propuesto coordinarte online y es que más que coordinarte, te descoordinas o no encuentras nada? Date un trimestre… y si no ha habido avance, cambia de táctica. Quizás la forma en la que te estés coordinando, planificando u organizando no sea la correcta, la que tú necesitas. Todos somos un mundo completamente diferente y ya te pueden decir que la manera A de organizarse es la mejor pero si a ti no te funciona, ¡pasa a la manera B, y sigue probando!

Con esto quiero decir que, aunque te hayas sacado la plaza, aunque lleves 20 años de profe, debemos estar alerta de si nuestros métodos funcionan o se han quedado, por lo que sea, obsoletos. Y si no funcionan, ¡¡debemos cambiarlos!! Normalmente, yo hago esta reflexión al final del verano para empezar septiembre ya con la cabeza medio amueblada y sabiendo cómo organizarme. Algunos profes utilizan los últimos días de verano para programar, o para hacer e imprimir materiales cuquis, pero más que todo ello, a mí me parece que lo más importante de todo es saber cómo te vas a organizar tú: tutorías, papeleo… ¡¡hasta dónde y cómo guardar los exámenes!! Una vez tengas todo ello controlado, puedes seguir avanzando en la planificación del curso, porque para mí, el éxito de todo se encuentra en una buena ORGANIZACIÓN.

¿Y tú? ¿Qué opinas? ¡Te leo!